
Una rara enfermedad renal crónica, que afecta principalmente a agricultores de El Salvador ha matado al menos a 5.296 salvadoreños desde 2002, informó hoy a Efe un especialista del Ministerio de Salud, que investiga este problema desde hace varios años.
Según datos estadísticos oficiales, de los 5.296 fallecidos por la “atípica” enfermedad renal crónica, que tiene “elevada ocurrencia” en el oriente y occidente del país, 652 murieron el año pasado.
La insuficiencia renal crónica, que es la última etapa de la enfermedad renal crónica, “es la primera causa de mortalidad a nivel hospitalario en adultos en El Salvador” desde hace una década, declaró a Efe el coordinador nacional de Investigaciones Renales del Ministerio de Salud, el nefrólogo Carlos Manuel Orantes.
En 2009 se inició una investigación para precisar el comportamiento de la enfermedad en once comunidades del “oriente y occidente” del país, donde existe una “elevada ocurrencia” de los problemas renales crónicos, precisó el especialista.
Hasta el momento no se han determinado las causas de la “epidemia”, que se “está comportando de una manera atípica” en esas zonas, pero se maneja la “hipótesis” de que la enfermedad está asociada “al tipo de actividad laboral, a factores ambientales y a la exposición con sustancias tóxicas”.
Esas primeras luces sobre las causas del padecimiento se obtuvieron a través del estudio de análisis practicados a 5.018 personas de todas las edades en las comunidades afectadas.
Orantes aclaró que, más allá de los factores ambientales como faenas largas con altas temperaturas bajo un sol inclemente que viven los campesinos, el “factor de riesgo” fundamental podría ser el “contacto con sustancias agroquímicas”, aunque, reafirmó, es solo una hipótesis, al menos de momento.
“Son agroquímicos que en muchos países están proscritos y siguen utilizándose acá en el país. Además, lo utilizan en grandes cantidades, muchas veces mezclados y sin protección” para los trabajadores, sostuvo Orantes, sin especificar qué tipo de químicos.
Ver publicación completa »