Una epidemia es una enfermedad que se propaga durante un cierto periodo de tiempo en una zona geográfica determinada y que afecta simultáneamente a muchas personas. Se trata de una noción utilizada por la salud comunitaria para hacer referencia al hecho de que la enfermedad llega a una cantidad de gente superior a la esperada.
Esto implica la existencia de niveles de incidencia que son considerados normales para una enfermedad. Un cierto número de afectados, por lo tanto, es esperado por los especialistas para un momento dado. Cuando el número de enfermos supera esa media, se habla de epidemia (hay una mayor cantidad de casos en comparación a los casos previstos).
La disciplina científica que se encarga del análisis de las epidemias se conoce como epidemiología. Los epidemiólogos se dedican a estudiar la distribución, frecuencia y determinantes de los factores vinculados a las enfermedades en una comunidad humana. La epidemiología, por lo tanto, combina nociones de la medicina con principios de las ciencias sociales para ayudar al control de las enfermedades y a predecir posibles brotes epidemiológicos.
Cuando la epidemia se expande por varios países, se transforma en una pandemia. El origen etimológico de esta palabra significa “enfermedad de todo el pueblo”. La pandemia suele producirse ante la aparición de un nuevo virus (para el cual no existe ningún tipo de inmunidad).
Por otra parte, cuando la epidemia se mantiene en una misma zona durante un periodo de tiempo prolongado se convierte en una endemia. Este es el caso de la malaria en varios países africanos.